Los hilos del poder Cuauhtémoc Ramos Escobar LOS MALES DE JOSEFINA
Mazatlán,Sinaloa 06-Abril-2012.-Vestida más bien para el caso y aprovechando la ocasión de demostrar que goza de cabal salud, a pesar de trastrabillar un día antes, la candidata presidencial del PAN, Josefina Vázquez Mota, en ropa ligera posó para la foto, y el fotógrafo de su equipo de campaña, por supuesto, nunca reveló la cara ni el semblante natural de su rostro que manifestara fatiga.
Lo anterior se dio en las instalaciones de un gimnasio, en Ensenada, B.C., donde la presidenciable panista estuvo en una sesión de 40 minutos, realizando ejercicios con instrumentos y un equipo elíptico para desarrollar y fortalecer brazos y piernas, sin mostrar agotamiento, que no fuera por lo natural del esfuerzo físico y sin desmerecimiento de su imagen.
Las prácticas del gimnasio fueron para dar respuesta y mostrar evidencias contrarias a lo que un día antes le sucediera a Vázquez Mota en la Ciudad de México. Su evidente desmayo.
El pasado día 3 del presente Josefina sufrió un vahído del que todos han hablado, y hasta ella por no poderlo evitar lo consideró como un desvanecimiento ligero, “a causa de su baja presión”, padecimiento que preocupa en general al panismo, porque su candidata pueda no estar del todo sana y biológicamente no goce de cabal salud, como la responsabilidad del cargo lo requiere.
Periodistas afines y miembros de su equipo, empeñosamente han tratado de desvirtuar el padecimiento, y en contrario alegan, sobre su salud real, mostrando un semblante poco convincente a contraluz (en las fotos) del gimnasio en Ensenada, y muy distinto al del acto donde respondía al proyecto de Alejandro Martí sobre seguridad en la Ciudad de México, el día anterior.
Pero como los abogados en su lenguaje común dicen “que a confesión de parte relevo de pruebas”, Josefina confesó que padece de “baja presión” y, en consecuencia, aconsejada por sus asesores, posó para la cámara en ropa ligera y deportiva, mostrando piernas y un rostro sonriente con el cabello recogido, no del todo apreciable por la distancia y el contraste de la luz, ejercitándose en aparatos propios de gimnastas sanos.
En piernas Josefina no está mal, como su rostro, y en las práctica que la obligaron a hacer tampoco se nota el esfuerzo, ni tan siquiera ligero, que le desprendiera algunas gotas de sudor corporal, porque ahí fue a posar no a ejercitarse a mediana intensidad y menos a correr riesgos de nuevos desvanecimientos.
Y reiteramos que “a confesión de parte relevo de pruebas” la candidata panista utilizó las instalaciones y equipo del gimnasio para negar de esa manera lo que ella misma confesó y, de no haber dicho lo que manifestó sobre su mal, nadie la hubiese obligado a recorrer en plataformas de caminatas, ni de recurrir a aparatos dizque para fortalecer el organismo en forma integral o pasar la prueba del esfuerzo.
Saliendo del gimnasio los miembros cercanos de su equipo, se dieron por satisfechos, contrarios en general a lo que piensan millones de mexicanos, por la vuelta que le dieron en los medios a la imagen de temblores corporales y la palidez de su piel que Josefina mostró en el acto de Alejandro Martí y, sin poder mantenerse de pie, optó por sentarse a leer el documento el miércoles pasado.Hay panistas que muestran preocupación por la salud de su abanderada presidencial, aunque les digan que está completamente sana y presuma pasos de baile, como ayer lo hizo la candidata, con cierto candor facial.
Veredes pues… cosas veredes.