BÚNKER POLÍTICO

ADRIÁN LUJÁN

Las decisiones de Peña Nieto

El día “D” para el Presidente Enrique Peña Nieto llegó y junto a él un cúmulo de situaciones que se fueron extendiendo desde los primeros minutos del sábado cuando le fueron transferidos los Poderes de la Nación.

Así, por la madrugada y con la investidura de Presidente, Peña Nieto le tomó protesta a las fuerzas Armadas: al nuevo Secretario de Marina, Livian Soberón,  al titular de la Defensa Nacional, Salvador Cinfuegos y al Secretario de Seguridad Federal (encargado del desapacho) Manuel Mondragón.

Y tras los primeros mandatos acudió a punto de medio día a una resguardada y blindada Cámara de Diputados, la cual desde la madrugada fue asegurada al interior por diputados y diputadas priistas, quienes se apeltrecharon en los pasillos para evitar el “golpe” de los izquierdistas.

Para cuando el Presidente saliente Calderón y Peña Nieto llegaron al recinto de San Lázaro, ya seis jóvenes, presuntos integrantes del “Yo Soy 132” resultaron gravemente heridos por balas de goma. Esto fue aprovechado por el Diputado de Convergencia, Ricardo Monreal, quien aseguró que Carlos Valdivia había fallecido en el enfrentamiento con la Policía. Más tarde fue desmentido por el Diputado sinaloense, Heriberto Galindo Quiñones. Este joven fue “carne de cañón” y convertido en mártir apócrifo por Monreal.
Si bien no hubo protestas como hace seis años cuando asumió Felipe Calderón, los diputados protestantes arrojaron billetes falsos a la llegada de Peña, quien no pareció inmutarse. Recibió gritos de apoyo y de reclamo. La tribuna dividida cual pelea de box. Se supo que ante el paso de Calderón por la zona de prensa, dos periodistas le dijeron: “Dios te perdone por los muertos Calderón”. Alejandra Sota, que fue su jefa de Prensa, sólo miró asombrada, buscando a los responsables del reclamo.

Peña Nieto protestó como Presidente de los Estados Unidos Mexicanos. Hubo reclamos, gritos, pero los priistas callaron a los protestantes. “Peña Presidente, Peña Presidente”, era el grito de júbilo priista.

 
En su mensaje de 45 minutos a la Nación en Palacio Nacional, el Presidente delineó sus decisiones y las plasmó en apoyo al desarrollo social, económico, infraestructura, salud y seguridad. Dijo que habrá apoyo a los adultos mayores, a las mujeres que se queden sin recursos; anunció una Cruzada Nacional contra el Hambre, la promulgación de una Ley para ayudar a quienes sean víctimas del delito, un programa de prevención a la salud y reactivar el sistema ferroviario de México.

Pero la decisión que quizá despertó la molestia de los grupos poderosos de este país, fue cuando se refirió a que estaba de acuerdo en impulsar dos nuevos canales en la televisión abierta. No imaginamos el malestar de los Azcárraga o de los Salinas, dueños de las dos televisoras. En su mensaje, Peña aseguró que su gobierno será cercano a la sociedad y se pronunció por un pacto nacional que venga a impulsar el desarrollo de México. 

Línea privada… Empresarios sinaloenses se dieron cita en Palacio Nacional para atestiguar el mensaje del Presidente Enrique Peña Nieto, estaba Juan Manuel Ley, Eustaquio de Nicolás, Jesús Vizcarra Calderón y el mazatleco, empresario atunero, Eduvigildo Carranza Beltrán. También vimos que el Diputado priista, Jesús Valdés Palazuelos, tomó fotografias a Peña Nieto y el Senador Daniel Amador, le saludó en su entrada a la tribuna de San Lázaro. 

Las preguntas de salida… Muchos se preguntan, en ¿dónde quedó Francisco Labastida Ochoa?, se suponía que el ex Gobernador sinaloense ocuparía un puesto de primer nivel en el Gabinete dado a conocer el viernes. ¿Cómo será la relación del Gobernador Mario López Valdez, ahora que Peña ya tiene la Banda Presidencial? ¿Dónde quedará el millanismo en Sinaloa ante el poder de Heriberto Galindo y David López Gutiérrez, coordinador de Comunicación Social de la Presidencia?.